Christian Lengua
La galería de arte Dédalo, con sede en Barranco y una franquicia en Larcomar, busca recuperar el 60% de compradores extranjeros que tenía en tienda antes de la pandemia. Para ello acaba de estrenar una plataforma de e-commerce en inglés y español, donde están disponibles las 35,000 piezas producidas por artistas y artesanos peruanos.
“En enero pasado, el diario New York Times publicó una reseña sobre sitios que debes visitar en el mundo, y cuando se refieren a Lima uno de ellos fuimos nosotros. Con eso te das cuenta de cuánto nos ha afectado la pandemia. Ahora la web es la manera de que la montaña llegue a Mahoma”, explicó María Elena Fernández, directora creativa y gerente.
La tienda de Barranco reabrió en julio, luego de tres meses y medio de cierre del local. En noviembre del 2019 vendieron 5,144 productos, y en diciembre 6,996 productos. Ahora, siendo realistas, buscan acercarse al 50%. En cuanto al ticket promedio, en temporada regular podía ser entre S/ 450 y S/ 500 y ahora es la tercera parte de ese monto.
Por lo pronto, impulsan el regreso con todos los protocolos a la casona de 1,100 metros cuadrados en Barranco. Allí se realiza el Exponatale, donde además de las piezas de arte y artesanía, tienen una muestra de juguetes artesanales, peruanos y hechos a mano.
Otra innovación por pandemia es que se han sumado propuestas gastronómicas a la galería como La Bodega de la Cafetería, con productos gourmet y orgánicos, y una carretilla de helados artesanales. Al ser una empresa familiar, Mariana, su hija, está a cargo de este proyecto; Gabriel se encarga de la web y Paloma del contenido online.
Fernández reconoció que un aspecto importante fue el crédito de Reactiva, que les permitió dar continuidad a la empresa, que en mayo cumple 30 años.
“Si analizas la proyección de la tienda virtual podría ser un mundo aparte. Si esto comienza a pegar, vamos a tener que abastecer una demanda en Europa y Estados Unidos. Vamos a concentrarnos en que esto funcione bien, y, eventualmente, se podría pensar en abrir una tienda en el extranjero”, dijo.
Manos peruanas
Entre 700 y 1,000 proveedores trabajan con Dédalo. Ofrecen accesorios para hombre y mujer, obras de arte (pinturas, esculturas, grabados, fotografías), artesanía tradicional, decoración para casa, joyería, entre otros. Todo hecho a mano y con diseños únicos.
“Somos representantes de la calidad que se hace en el Perú. De alguna manera puedes ver que el diseño peruano puede competir con el mejor diseño de cualquier país del mundo”, contó Fernández.