(Bloomberg) La porción del gasto estadounidense total de los de marca en sus productos está disminuyendo, según un análisis patrocinado por un grupo industrial que trata de evitar un análisis minucioso de los precios en alza.

De los aproximadamente US$ 349,100 millones que las aseguradoras y los pacientes pagaron por medicamentos de marca en el 2015, las compañías farmacéuticas cobraron como ingresos US$ 218,600 millones, es decir 63%, según un análisis pagado por el lobby farmacéutico de Washington, Pharmaceutical Research and Manufacturers of America.

En el 2013, las compañías farmacéuticas se quedaron con US$ 177,500 millones, o sea 67% de los US$ 264,900 millones de gastos brutos correspondientes a medicamentos de marca.

Los laboratorios están enfrentando presiones de los legisladores de Washington y de los pacientes a raíz de los precios más altos de medicamentos como la insulina, que los diabéticos necesitan para sobrevivir.

En una conferencia de prensa la semana pasada, el presidente electo Donald Trump dijo que el sector "se sale con la suya" y amenazó con obligar a las empresas a licitar contratos con el Estado.

Las empresas farmacéuticas dicen que importantes descuentos y reintegros pagados a intermediarios, como los administradores de beneficios farmacéuticos, que negocian los precios para las aseguradoras y otros pagadores, reducen sus ingresos.

"Los fabricantes están ofreciendo rebajas cada vez más grandes para acceder a los pacientes", dijo en una entrevista Aaron Vandervelde, director ejecutivo en la firma consultora Berkeley Research Group y autor principal del informe. "Eso neutraliza en gran medida los aumentos de los precios de lista".

Secretos industrialesEn total, los fabricantes de medicamentos de marca pagaron descuentos, comisiones y reintegros por US$ 106,400 millones a los planes de salud, los administradores de beneficios farmacéuticos y los planes públicos de salud estadounidenses en el 2015, en comparación con US$ 67,000 millones en el 2013, según el informe.

El análisis de Berkeley es uno de los primeros intentos de sumar la variedad de reintegros y descuentos pagados sobre los medicamentos de marca, cuyos detalles exactos son secretos industriales cuidadosamente guardados.

El grupo consultor también estimó los márgenes y las comisiones que obtienen en distintas fases de la cadena de abastecimiento de medicamentos tanto los distribuidores y las farmacias como los proveedores de salud que administran los remedios.

En líneas generales, el análisis comprobó que en el 2015 los laboratorios de medicamentos de marca pagaron US$ 57,700 millones en reintegros a administradores de beneficios farmacéuticos y planes de salud, en comparación con US$ 33,200 millones en el 2013.

Además, las empresas pagaron US$ 28,300 millones en reintegros dentro del plan Medicaid para los pobres, en comparación con US$ 19,100 millones en el 2013.

"Gran parte del debate público y en los medios se centra en el precio de lista" de los medicamentos, dijo en una entrevista telefónica Stephen Ubl, máximo responsable de PhRMA. "Esta investigación es la primera que muestra lo que ocurre cuando el precio de lista se encuentra con las fuerzas del mercado privado".

Los administradores de beneficios farmacéuticos dijeron que sus negociaciones contribuyen a mantener los precios de los medicamentos bajo control, en parte enfrentando a laboratorios rivales entre sí para obtener mejores ofertas.

Los autores del informe también estimaron el gasto en copias genéricas de medicamentos de marca. Si bien en el 2015 se gastaron US$ 214,000 millones en medicamentos genéricos, según Vandervelde, el informe constató que de esa suma fueron a los fabricantes US$ 107,600 millones.