(Foto: Reuters)
(Foto: Reuters)

China anunció que denunció ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) a Australia por los aranceles que aplica a las exportaciones chinas de turbinas eólicas y otros productos manufacturados, por considerarlos competencia desleal.

Este anuncio se produce menos de una semana después de que demandara a China ante la OMC por las tasas excesivas que aplica a las importaciones de sus vinos.

El objetivo es “salvaguardar los derechos e intereses legítimos de las empresas chinas”, señaló el portavoz del ministerio de Comercio del país asiático, Gao Feng.

“Esperamos que Australia tome medidas concretas para corregir sus prácticas erróneas, evitar distorsiones en el comercio de estos productos y resituar este comercio en la senda normal lo antes posible”, añadió.

Además de los impuestos sobre sus turbinas eólicas, el ministerio de Comercio chino también denunció medidas australianas de contra sus exportaciones de ruedas de tren y fregaderos de metal, adoptadas en el 2019 y 2020.

Gao declaró el lunes que China “se opone al abuso de las medidas comerciales coercitivas” porque no solo perjudican a los “derechos e intereses legítimos de las empresas chinas” sino también a la autoridad de la OMC.

“Compromiso chino”

Este jueves, el ministro de Comercio australiano, Dan Tehan, aseguró a los periodistas que su país “defenderá enérgicamente las medidas instauradas”.

Tehan precisó que Australia quiere un “compromiso constructivo con el gobierno chino”, pero que las medidas se implementaron “después de un análisis riguroso”.

Las relaciones bilaterales comenzaron a deteriorarse en el 2018, cuando Australia excluyó al gigante chino de las telecomunicaciones Huawei de la construcción de su red 5G argumentando que significaba un riesgo para la seguridad nacional.

La situación empeoró cuando el primer ministro australiano, Scott Morrison, se sumó a Estados Unidos y exigió una investigación internacional sobre los orígenes de la epidemia de . China, el primer país afectado por la pandemia, lo consideró hostil y fomentado por motivos políticos.

Australia también reprochó a China su política de represión de la oposición prodemocracia en Hong Kong.

Después, China impuso sanciones económicas a una serie de productos australianos, incluyendo aranceles a productos agrícolas, carbón o vinos (derechos de aduana de hasta 218% que se aplicaron en noviembre del 2020).

Australia era hasta entonces el primer exportador de vinos hacia China pero el mercado se cerró y las ventas, que representaban unos 1.100 millones de dólares australianos (840 millones de dólares estadounidenses) se redujeron a 20 millones de dólares australianos, según las cifras oficiales.

La denuncia australiana ante la se presentó tras las advertencias de Morrison sobre la voluntad de su gobierno de responder con fuerza a los países que intenten utilizar la “coacción económica” contra Australia.

La demanda australiana ante la OMC por aranceles contra sus vinos se anunció días después de la cumbre de los siete países más industrializados, el G7, en el Reino Unido, donde Australia abogó por actuar con más firmeza frente a las prácticas comerciales de .

Además, el gobierno de Morrison ya había denunciado a Pekín ante la OMC por los aranceles excesivos a la cebada australiana.