(Foto: Fábio Garcez/ G1)
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El banco brasileño Caixa Economica Federal está considerando tomar medidas que obligarían a a buscar protección por bancarrota, según personas con conocimiento del asunto.

El banco del gobierno planea pedirle a la compañía controladora que acelere los pagos de la deuda activando una cláusula de incumplimiento cruzado, después de que la unidad de etanol de Odebrecht, , solicitara la semana pasada protección judicial de los acreedores, dijeron estas personas, quienes pidieron no ser nombradas por tratarse de discusiones privadas.

La compañía controladora respalda cerca de 11,000 millones de reales que Atvos ha tomado prestado de bancos locales, con los seis prestamistas más grandes de entre los acreedores, incluido Caixa. En total, el conglomerado debe alrededor de 6,000 millones de reales (US$ 1,560 millones) a Caixa, así como a un fondo administrado por el banco, y esta deuda no tiene garantía, dijeron tres de las personas.

Un representante de Caixa declinó hacer comentarios. Un representante de Odebrecht dijo que no hay planes para solicitar protección por bancarrota.

La sociedad privada Odebrecht, que ha estado buscando reestructurar alrededor de 5,000 millones de reales de su propia deuda, enfrenta presiones luego del colapso de las conversaciones con LyondellBasell Industries NV sobre uno de sus activos más valiosos, las acciones de su unidad petroquímica, . Un acuerdo habría traído una inyección de efectivo muy necesaria, pero luego de meses de negociaciones, las compañías informaron el martes que las conversaciones han terminado.

Si la compañía controladora solicita protección judicial, las negociaciones para vender Braskem se pospondrán, ya que las acciones de la compañía se incluirán entre los activos que se dividirán entre los acreedores, dijeron las personas. La participación en Braskem ya está comprometida como garantía de para los préstamos de los bancos locales.

Atvos, el segundo mayor productor de etanol de Brasil, dijo la semana pasada que la solicitud de protección por bancarrota es el resultado de "una presión hostil de un fondo internacional".

Odebrecht, con una deuda total de casi 100,000 millones de reales, está sufriendo las consecuencias de la disminución del flujo de efectivo después de que la industria de la construcción latinoamericana se detuviera, en medio de la llamada investigación de corrupción , la cual envió a algunos de sus ejecutivos y accionistas a la cárcel. La decisión de un tribunal de bloquear los dividendos de Braskem por 2,670 millones de reales a los accionistas también se suma a la crisis de efectivo de Odebrecht.

Además de Atvos, otras unidades de Odebrecht también corren el riesgo de tener que solicitar protección por bancarrota contra los acreedores. Entre estos se incluyen la unidad de bienes raíces OR y el astillero Enseada Industria Naval Participacoes SA, dijeron las personas.

La unidad de construcción Odebrecht Engenharia e Construcao SA ha estado intentando alcanzar un acuerdo para reestructurar US$ 3,000 millones de deuda en mora desde noviembre. Las conversaciones entre el constructor y la mayoría de los titulares de bonos liderados por Gramercy Funds Management LLC están tomando más tiempo de lo que desea un grupo de acreedores minoritarios, dijeron personas el mes pasado.

El martes temprano, el periódico O Estado de S. Paulo dijo que Caixa Economica Federal y el Banco Votorantim le indicaron a Odebrecht que podrían exigir las garantías para los préstamos otorgados a la empresa, sin decir cómo obtuvo la información. Representantes de Votorantim y Caixa declinaron hacer comentarios, mientras que Odebrecht reiteró que está trabajando en soluciones para estabilizar las finanzas del grupo.