Primer ministro irlandés, Leo Varadkar. (Foto: Bloomberg)
Primer ministro irlandés, Leo Varadkar. (Foto: Bloomberg)

Bloomberg. Una tarde gris en Dublín puede haber marcado el punto en el que Irlanda y Apple realmente comenzaron a desenamorarse, al menos públicamente.

Hasta aproximadamente las 4.15 p.m. del martes, el joven primer ministro irlandés, Leo Varadkar, y Tim Cook, de Apple Inc., se mantenían codo con codo, unidos para luchar contra la opinión de Europa de que el gobierno irlandés había otorgado al creador de iPhone un atractivo acuerdo tributario.

Esa alianza comenzó a desvanecerse esta semana, luego de que Varadkar finalmente culpara a Apple por las demoras en la recaudación de alrededor de 13,000 millones de euros (US$ 15,300 millones) en impuestos atrasados que Irlanda tenía orden de cobrar a la compañía. La Comisión Europea demandó a Irlanda en octubre por no recaudar el dinero lo suficientemente rápido.

“No queremos estar en una situación en la que el gobierno irlandés deba llevar a Apple ante los tribunales porque la comisión lleva al gobierno irlandés ante los tribunales", dijo Varadkar, de 38 años, a los miembros del parlamento en Dublín el martes. "Creo que ese mensaje se comprende".Apple declinó comentar sobre este tema.

Tres décadas
La intervención de Varadkar es la señal más reciente de que es posible que algo no ande bien en una asociación que se remonta a más de tres décadas. Mientras que ambos unieron fuerzas para luchar contra Europa en la cuestión tributaria, en otros ámbitos también han surgido tensiones, principalmente en torno a los retrasos que afectan el plan de Apple de construir un centro de datos de US$ 1,000 millones cerca de la costa atlántica, en el oeste de Irlanda.

Hace dos años, Apple presentó simultáneamente planes para construir dichas instalaciones en Irlanda y Dinamarca, como parte de una de sus mayores inversiones en Europa Occidental. Mientras la construcción de la instalación danesa se ha terminado, el sitio elegido en medio de un bosque irlandés permanece inactivo, bloqueado por una combinación de objetores y retrasos judiciales.

Después de que Bloomberg News informara por primera vez en septiembre que el proyecto estaba en peligro, Varadkar dijo que le habían asegurado que Apple seguía comprometido con el proyecto.

Un mes después, en una reunión con el líder irlandés en la sede central de Apple en California, Cook rehusó darle garantías a Varadkar de que seguiría adelante.Apple acordó seguir considerando el lugar, cerca de la pequeña e histórica villa medieval de Athenry, solo "en el contexto de sus futuros planes de negocios", según Varadkar, dejándolo expuesto a la vergüenza política en su país.

Perdiendo la paciencia
Mientras tanto, las autoridades europeas estaban cada vez más inquietas por el asunto de los impuestos. El gobierno irlandés debía cobrar el efectivo antes del 3 de enero y mantenerlo en custodia hasta que concluya el proceso de apelación.

Tanto Apple como Irlanda están luchando contra la decisión de la UE, lo que podría tomar hasta cinco años.El mes pasado, en medio de una serie de demoras, la comisaria de Competencia de la UE, Margrethe Vestager, finalmente perdió la paciencia, e Irlanda fue remitida al Tribunal de Justicia de la Unión Europea por no haber recuperado el dinero. Esto podría derivar en una multa al gobierno.

Hasta ahora, el gobierno ha evitado de forma diplomática culpar públicamente a alguien por el retraso, y Varadkar tiene que ser cauteloso. Apple emplea a unas 6,000 personas en Irlanda, según su sitio web. La mayoría de ellos se encuentran en Cork, donde Apple es uno de los mayores empleadores privados de la ciudad. La compañía también se encuentra entre los mayores contribuyentes del país.

Sin embargo, ayer, Varadkar también pareció perder la paciencia."Le hemos indicado que queremos que se establezca la cuenta de fondos en custodia y que los fondos se paguen a esa cuenta sin más demoras", señaló el martes al parlamento irlandés. "Ese mensaje fue comprendido y anticipo que veremos progresos sobre el asunto en las próximas semanas".