Los candidatos a la Presidencia de la República también tienen dentro de sus planes de gobierno impulsar una política para el desarrollo del comercio exterior. Sin embargo, no todas ellas podrían favorecer a este importante brazo de la economía peruana.
La Asociación de Exportadores (ADEX), a través de los encuentros denominados “Por la Reactivación y Desarrollo de las Exportaciones Peruanas”, ha identificado una serie de iniciativas positivas, negativas y las que requieren mayor detalle de seis candidatos a la presidencia para el el periodo 2021-2026, esto a fin que la ciudadanía pueda tomar decisiones de manera informada.
Las propuestas analizadas hasta el momento son de los potenciales gobiernos liderados de George Forsyth (Victoria Nacional) Yonhy Lescano (Acción Popular), Rafael López Aliaga (Renovación Popular), Daniel Urresti (Podemos Perú), Verónika Mendoza (Juntos por el Perú) y Julio Guzmán (Partido Morado).
Durante este mes de conocerán las propuestas de los candidatos restantes y que el gremio exportador también analizará: Keiko Fujimori (Fuerza Popular), Hernando de Soto (Avanza País), Daniel Salaverry (Somos Perú), Alberto Beingolea (Partido Popular Cristiano), Rafael Santos (Perú Patria Segura), César Acuña (Alianza por el Progreso) y Marco Arana (Frente Amplio).
Los resultados
En diálogo con Gestión.pe el director del Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales de ADEX, Edgar Vázquez, señala que dentro de las propuestas lanzadas por los candidatos se observa cuatro coincidencias positivas y tres negativas.
Positivos:
1.- La mayoría de candidatos coincide que el Perú necesita mejorar su competitividad y elemento fundamental de esta competitividad es el desarrollo de la infraestructura de conectividad asociada al comercio exterior.
“Coinciden en la necesidad de mejorar puertos, aeropuertos, carreteras. Algunos hablan de zonas francas de exportación, es decir, infraestructura como componente”, indicó.
2.- Se tiene una posición favorable hacia la integración que el Perú ha logrado con el mundo a través de los Tratados de Libre Comercio (TLC). Incluso, los candidatos que son izquierda han manifestado que la integración ha sido positiva. Hay algunos tamices que se podrían corregir, sin embargo, se coincide en que es positiva la integración y los TLC han ayudado en eso.
3.- Los postulantes también mencionar que es necesario una coordinación pública privada pues se observan propuestas sobre potenciar las mesas de diálogo, solucionar los conflictos a través de una apertura al sector público, sector privado y distintos stakeholders.
“La mayoría por lo menos en discurso considera que no se ha estado manejando bien el diálogo y lo quisieran mejorar”, dijo Vásquez.
4.- De igual manera se observa un punto en común respecto al apoyo financiero, principalmente a las micro pequeñas empresas, las cuales han sido impactadas por la pandemia del COVID-19.
“Algunos que hablan de mejorar o ampliar por dos años la garantía del programa Reactiva Perú, otros proponen nuevos fondos y de distintos instrumentos que se estarían buscando introducir para el apoyo de las pymes”, dijo el representante de ADEX.
Negativos
1.- Entre las propuestas que podrían perjudicar el comercio exterior de Perú figuran las medidas de protección a la industria local. Si bien es un mensaje políticamente correcto en este momento porque se busca que la industria nacional se desarrolle -indica Vásquez-, los instrumentos que se proponen no son necesariamente instrumentos correctos en la parte técnica legal de cumplimientos de los compromisos internacionales.
“Es fácil decir que se aplicará -por ejemplo- salvaguardias. Sin embargo, las salvaguardias están reguladas en el entorno internacional por la Organización Mundial de Comercio (OMC). Se debe seguir un procedimiento y si ese procedimiento hecho de manera técnica determina que sí hay que imponerse una medida de protección, se impone, pero si la investigación no lo determina, no se puede imponer”, aseveró.
2.- Otro segundo común denominado en las propuestas negativas giran en torno a una posición muy política a los cambios de la Nueva Ley Agraria, cuando aún no se tiene claridad sobre el reglamento. Vásquez señala que corresponde es abrir un dialogo franco y se pueda definir una legislación que pueda cubrir los derechos que se han vulnerado por parte de los trabajadores, mejorar la fiscalización laboral y a la vez, mantener el atractivo de un sector (agroindustria) que inclusive en situación en pandemia es el único que ha podido crecer.
“Los candidatos no lo están viendo de esa forma. Lo están viendo más de una perspectiva política que una perspectiva de lo que conviene al Perú, a los trabajadores agrarios, y a las empresas”, afirmó.
3.- Se observa un desconocimiento de la administración pública en las formas, los objetivos y los resultados. Y es que de acuerdo a las propuestas planteas, algunas de ellas proponen eliminar el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo y fusionarlo con otros ministerios, como el de Relaciones Exteriores o de la Producción.
“Si uno lo ve a luz del presupuesto, el Mincetur representa el 0.3% del gobierno central y usualmente lo que quieren los candidatos es fusionar los ministerios para reducir gastos, pero los ministerios que están queriendo fusionar son ministerios de bajo gasto, es decir no van a ahorrar mucho, van a generar desatención y poner en riesgo los resultados que se han dado en determinados sectores”, dijo.
Cómo reciben el sector
Quien asuma el cargo en las próximas elecciones recibirá un sector exportador golpeado no solo por la pandemia del coronavirus. El director del Centro de Investigación de Economía y Negocios Globales de ADEX, Edgar Vázquez, indica que el sector exportador está pasando por una de sus mayores crisis históricas, a igual que la economía mundial.
Explica que el comercio exterior ha venido afectado desde años antes de la llegada de la pandemia, particularmente desde el ingreso del entonces presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien generó toda una dinámica en el comercio internacional compleja que derivó, incluso, a una guerra comercial entre China y Estados Unidos; y que impactó en los despachos peruanos.
En el último año, los envíos peruanos se vieron afectados fuertemente por la crisis generada por el coronavirus y el 2020 cerró con una contracción de 15%, por cuatros ‘shocks’, explica Vásquez.
El primero de ellos fue el shock de la demanda global, pues se registró una contracción por la recesión de las mayores economías del mundo a excepción de China. El segundo shock estuvo asociado a los precios internacionales, sobre todo en el primer semestre del año 2020, en la cual los precios de los minerales, particularmente el cobre, tuvieron una fuerte contracción.
El tercer shock, agrega, fue de oferta, debido a que en el Perú la cuarentena fue muy drástica por lo que muchas actividades -incluyendo la minería que es la principal fuente de generación de divisas- se vieron paralizadas, afectando la oferta exportadora peruana.
Finalmente, se registró un shock logístico en la que los puertos tuvieron que detener operaciones, principalmente China, lo que generó una retraso en la línea de abastecimiento (escases de contenedores).
“Esa situación se aligeró en el segundo semestre del 2020, pero se ha vuelto a intensificar ahora en el inicio del año 2021 porque la economía china mas bien se está recuperando más de lo que se esperaba y ahora hay una alta demanda. Incluso es más rentable enviar el contenedor vacío a China para que desde ahí salga con mercancía hacia el resto del mundo. Ahora hay una crisis generada por la logística, pero por la alta demanda de contenedores ante la recuperación de China”, dijo.