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El COVID-19 afectó fuertemente los negocios de mujeres en situación de pobreza o en riesgo de caer en ella.
Para afrontar esta pandemia, el 72% de microempresarias en condición de vulnerabilidad optó por cambiar de giro (48%) o agregar un negocio (24%), lo que, comparado con los clientes con crédito individual, indica que son más radicales en sus decisiones, dijo Luis Germán Linares, gerente general de Financiera Confianza, parte de la Fundación BBVA Microfinanzas.
“La microemprendedora vive de su negocio del día a día; algún cambio o modificación en su estrategia de conseguir el dinero la hace más propensa a escoger un cambio más claro. Incluso volver a ser dependiente es algo que se observa con mayor facilidad en este segmento”, afirmó.
De forma radical
Por ello, dijo, algunas viraron a negocios de comercio y servicios que les permiten atender desde casa y no les genera inconvenientes de movilidad.
Además, salieron a flote la venta por catálogo y las bodegas, mientras que los vendedores ambulantes ofrecen productos de primera necesidad, agregó.
En la misma línea, indicó que los negocios en zonas rurales son más proclives a cambiar de giro pues solo tienen la opción de afrontar los problemas de forma radical, mientras que los de áreas urbanas cuentan con más posibilidades de adaptación y mercados más amplios.
Añadió que entre las acciones financieras tomadas por las microempresarias para enfrentar la cuarentena, la primera fue recurrir a ahorros, según un estudio realizado por la financiera y Centrum PUCP.
Mayor presión
“Para el 44% de emprendedoras sus ahorros fueron la principal respuesta, su barrera de contención frente a esta pandemia, seguida por dejar de pagar algún préstamo (21%) o buscar otro trabajo (12%)”, refirió Linares.
Sin embargo, este mayor uso de los fondos guardados en años previos a la crisis está ejerciendo mayor presión sobre los gastos de la familia, y mientras se alargue esta situación apretará más a los hogares de bajos recursos, aseveró Percy Marquina, director general de Centrum PUCP.
Otra de las opciones por las que se decantaron las microempresarias fue solicitar dinero a un prestamista o un familiar, motivadas por los montos pequeños requeridos y el corto plazo en que se devuelven, aunque ello elevó sus costos financieros, acotó.
- Academia. Financiera Confianza y Centrum PUCP lanzarán la Academia Palabra de Mujer, programa de formación virtual y gratuito para microempresarias, que constará de ocho módulos e iniciará a mediados de marzo.