El resultado de enero habría sido menor al de diciembre. (Foto: Gonzalo Córdova | GEC)
El resultado de enero habría sido menor al de diciembre. (Foto: Gonzalo Córdova | GEC)

En enero, el PBI habría mostrado un resultado menor respecto a lo registrado en diciembre, lo que se vería reflejado en la menor producción de electricidad, prevé el Departamento de Estudios Económicos de Scotiabank.

En diciembre, el Producto Bruto Interno (PBI) creció 0.5% sorpresivamente, su primera tasa mensual positiva pospandemia.

La desaceleración de enero obedecería a las mayores restricciones de movilidad dispuestas en enero ante la segunda ola de contagios por COVID-19 -y previa a la cuarentena focalizada iniciada en febrero en nueve regiones-, lo que habría afectado los niveles de actividad del sector Comercio (ventas minoristas) y Servicios (restaurantes).

Asimismo, el sector Construcción habría registrado una expansión menor a la de diciembre puesto que si bien el despacho nacional de cemento (+18%) creció al mismo ritmo que en diciembre, la inversión pública cayó 30% en enero.

Por otro lado, el sector Pesca habría continuado mostrando altas tasas de crecimiento al igual que la Manufactura Primaria -la captura de anchoveta bordeó las 475,000 toneladas comparada con 5,000 de enero de 2020- mientras que la producción minera habría seguido con su recuperación, sumándose el oro al gradual aumento de la producción de cobre.

Diciembre de 2020

El crecimiento de 0.5% en diciembre fue mayor a la expectativa de entre -1.0% y -1.2% esperado en promedio por los analistas. Así, el PBI cerró el año 2020 con un retroceso de 11.1%, ligeramente por debajo de nuestra proyección de -11.5%.

Las principales diferencias con el estimado de Scotiabank para diciembre se concentraron en tres rubros. Primero, los sectores primarios crecieron por encima de lo previsto. Como habíamos estimado, la Pesca mostró un importante repunte (+108.5%) como consecuencia de la exitosa segunda campaña de anchoveta, lo que incidió también en la mayor producción de harina de pescado.

Esto último, junto a una caída menor a lo esperada en la refinación de petróleo y de metales, permitió el significativo crecimiento de la Manufactura Primaria (+43.2%), que aportó 1.2 puntos básicos al crecimiento del PBI en diciembre.

Segundo, el rubro Derechos de Importación y Otros Impuestos (+1.6%) mostró un resultado positivo por primera vez desde el indicio de la pandemia, reflejando una gradual recuperación de la actividad económica y de las importaciones.

Tercero, un efecto base estadístico positivo, pues el INEI -como parte de sus periódicos ajustes trimestrales- revisó a la baja el PBI de diciembre 2019, de 1.1% a 0.9%.

Por su parte, los sectores No Primarios continuaron con su tendencia hacia la recuperación, en línea con lo esperado. La Construcción (+23.1%) lideró esta evolución positiva gracias a la mayor demanda de cemento -proveniente principalmente del segmento de la autoconstrucción- y a la recuperación de la inversión pública. Además, el sector Comercio (-1.6%) reportó su menor baja mensual pospandemia gracias al incremento temporal del aforo en los locales, lo que benefició las ventas de supermercados y tiendas de mejoramiento del hogar.

Por último, el sector Servicios siguió con su paulatina recuperación, resaltando los rubros de Servicios Financieros (+23.2%) y Telecomunicaciones (+6.3%).