La demanda de encomiendas a nivel nacional se ha incrementado en promedio en 50% desde el inicio de la nueva cuarentena, debido a la necesidad de las familias de compartir entre sí medicinas u otros productos básicos, indicó Martín Ojeda, gerente general de la Asociación de Transporte Interprovincial de Ómnibus.
Sin embargo, los envíos no son atendidos oportunamente sino con retraso, puesto que las empresas de transporte ya no pueden utilizar los buses de transporte de personas. En las bodegas de estos vehículos usualmente se trasladaban las encomiendas.
“Ahora solo estamos haciendo los envíos en vehículos pequeños que ya teníamos, porque no podemos utilizar los buses y tampoco vamos a comprar vehículos nuevos en esta situación. Entonces, no estamos prestando el servicio de encomienda a toda nuestra capacidad. Si antes enviábamos 100, ahora enviamos 40”, dijo a gestion.pe.
Por esta razón, dichos negocios están percibiendo solo el 15% de los ingresos totales que obtenían en el periodo previo a la pandemia. Esta facturación tan reducida no permite a las empresas cubrir sus costos operativos, asegura.
En consecuencia, el gremio está buscando aplicar la suspensión perfecta a sus trabajadores. Para ello, se encuentra dialogando con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
Tras decretarse la cuarentena en las zonas de riesgo extremo de contagios por COVID-19, incluida Lima Metropolitana, se estableció que los buses de transporte interprovincial de pasajeros solo podrían circular hasta el martes dos de febrero en estas regiones. En cambio, en las zonas de riesgo alto y muy alto, este tipo de transporte está permitido y solo se exige el uso de la mascarilla y el protector facial.
También se ha suspendido el transporte aéreo en las regiones con nivel de alerta extremo, pero están permitidos los vuelos que aterrizan y despegan en el Aeropuerto internacional Jorge Chávez.
En opinión de Ojeda, la situación ha propiciado el incremento de los precios de los pasajes aéreos y del transporte ilegal de pasajeros por vía terrestre. Al quedarse sin la competencia de los buses interprovinciales formales, han elevado sus tarifas, afirmó.
Frente a esta situación, la propuesta del gremio es la de reanudar el transporte terrestre de personas con la condición de que los pasajeros antes se hayan realizado una prueba antígena para la detección de coronavirus. Según sostuvo, si el uso de este método de diagnóstico se hace masivo, su precio podría bajar hasta los S/ 50.