Redacción Gestión

redaccion@gestion.pe

Washington (Reuters).- La Casa Blanca está "desempolvando viejos planes" para una para contener el alza del precio de la gasolina y prevenir que los altos costos de la energía deterioren el éxito de las sanciones contra Irán, dijo una fuente con conocimiento de la situación.

Funcionarios de Estados Unidos vigilarán las condiciones del mercado durante las próximas semanas, para ver si los precios de la gasolina caen tras el feriado del 3 de setiembre, como usualmente ha ocurrido, dijo la fuente.

Aún es muy pronto para estimar de cuánto sería el descenso en la Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos, y potencialmente en otras reservas internacionales, si se toma la decisión de avanzar con la iniciativa, agregó la fuente.

Los precios del petróleo han trepado en las últimas semanas, y el barril de crudo Brent está cerca de 120 dólares por barril, muy por encima de los 90 dólares a los que se lo negociaba en julio.

y otros países del Grupo de los Ocho estudiaron la potencial liberación de petróleo en la primavera boreal, pero pospusieron esos planes cuando los precios cayeron.

Con los precios de nuevo al alza, funcionarios estadounidenses ahora están recolectando información del mercado sobre necesidades potenciales y estudiando cifras de producción y datos sobre las exportaciones de petróleo iraní.

"La fuerza impulsora en esto es tanto el impacto en la economía como en la política de sanciones de Irán", dijo la fuente, al destacar que no quiere que el alza del petróleo genere ganancias inesperadas para Irán mientras el embargo y las sanciones petroleras tienen un impacto efectivo.

Estados Unidos aún no ha mantenido conversaciones con sus socios internacionales para encarar una acción coordinada.

La fuente destacó que Gran Bretaña, Francia, Alemania y otras naciones miembro de la Agencia Internacional de Energía se mostraron abiertas a una potencial liberación de reservas hace unos meses, cuando las condiciones eran similares.

Estos países estaban preocupados entonces por el impacto de los altos precios del petróleo en la economía global y por Irán, y estos temores "siguen siendo igual de relevantes hoy".

A nivel doméstico, la liberación de reservas alentaría críticas de los republicanos, que la considerarían una decisión política para impulsar la imagen del presidente demócrata , que buscará su reelección el 6 de noviembre.