Oliva
Oliva

Luego de tres días de espera, el presidente Martín Vizcarra designó ayer a como nuevo ministro de Economía y Finanzas (MEF).

¿Cuáles serán los tres principales retos que Oliva deberá enfrentar al mando de esta cartera? A continuación, analistas y empresarios opinan sobre el tema:

1. Una sola voz en el Gabinete
Los primeros síntomas del desencuentro entre el exministro David Tuesta y el Gobierno se notaron cuando el Premier César Villanueva salió a negar cualquier versión sobre un cambio en el sistema tributario, tal como lo venía anunciando Tuesta.

Para evitar que ello vuelva a ocurrir será clave una coordinación constante entre el MEF, PCM y el Presidente, indicó Andreas von Wedemeyer, presidente de la Sociedad Nacional de Industrias.

“Espero que las experiencias vividas últimamente hagan que el Gabinete apoye al nuevo ministro y así evitar las marchas y contramarchas con algunas medidas”, señaló el ejecutivo a Gestión.pe.

2. Demandas "populistas"
La cohesión del Gabinete se pondrá a prueba cuando surjan nuevos conflictos y demandas sociales, por lo que allí se conocerá el carácter del nuevo ministro.

“Él tiene que trabajar de forma coordinada, pero con independencia del Presidente y Premier”, subrayó a Gestión.pe el economista Carlos Casas, docente en la Universidad del Pacífico.

“Oliva deberá soportar cualquier intento populista. Demandas de sindicatos, de gremios empresariales, entre otros. Pero no deberá ceder en la decisión que tome ya que tiene la responsabilidad de mantener la estabilidad fiscal”, agregó Casas, quien fue viceministro de Economía durante el Gobierno de Alan García.

Al respecto, el economista Jorge Guillén, docente en Esan, estimó que el reto para Oliva será grande, ya que lo considera “más técnico que político”.

“Ese será un gran reto político para el nuevo ministro. No se qué tan bien se lleve con el Premier y el Presidente”, anotó Guillén a Gestión.pe.

3. Mejora de la recaudación
El aumento de la recaudación tributaria es una de las tareas pendientes del actual Gobierno, más aún cuando presiona el déficit fiscal.

Ante ello, Carlos Casas sostiene que serán claves la mejora de la fiscalización tributaria y la reducción de las exoneraciones.

“Algún cambio en las tasas impositivas ahora ya no viene al caso, sino que se debe reponer la confianza y credibilidad del MEF”, subrayó.

Por su parte la presidenta de la Cámara de Comercio de Lima, Yolanda Torriani, se mostró de acuerdo con una “reforma tributaria integral”, pero estableciendo canales de diálogo con el sector privado.

“Nuestro país necesita una reforma integral tributaria, en la que deben participar no solo los funcionarios encargados de las finanzas públicas, sino también los agentes económicos como el sector empresarial. La Cámara de Comercio de Lima puede contribuir con esta reforma, contamos con especialistas. El presidente Vizcarra ha señalado que se requiere del compromiso de todos y nosotros le tomamos la palabra”, sostuvo Torriani.

TAGS RELACIONADOS