Redacción Gestión

redaccion@gestion.pe

¿Socios potenciales o rivales irreconciliables? El gremio de exportadores peruanos de palta, Prohass, por el bloqueo de sus productos en el país del sur.

, director del Departamento Económico de la Embajada de Chile e invitado a la V Convención de Agronegocios organizada por la , prefirió no adelantar opinión sobre el conflicto, aunque justificó la protección de su mercado por razones fitosanitarias.

¿En qué sectores y productos Chile y Perú son complementarios?Casi en todo. Si ves la foto general, pareciera que son muy similares. Primero la minería y luego el sector agroalimentario en importancia. Pero si empezamos a despejar el escenario, vemos que el principal producto agrícola del Perú es el café, que Chile importa para consumo interno y procesarlo.

Tenemos también frutas tropicales, que Perú produce y Chile compra, y los berries, que podemos estar coincidiendo en arándano, que ha llegado a Perú por inversiones chilenas. En el caso de la uva, solo nos cruzamos un mes en el año, porque la ventana de Perú es de octubre a enero y nosotros exportamos de enero a abril. Además, ustedes cultivan principalmente uva red globe y nosotros contamos con más variedades.

¿Esa complementariedad se ha visto plasmada en la realidad?Ya es una realidad, no es solo teoría. Existe una empresa de capitales chilenos y peruanos, , especializada en vender alimentos a China, donde es muy efectivo vender uvas por televisión, es un caso de éxito.

¿Qué rol cumplen los gremios?Los gremios desarrollan la confianza, que es vital. Chile y Perú pueden dar ejemplo de eso ejemplo al mundo. Si ves las cifras, no hay países más integrados, sobre todo en el mundo empresarial. Ya tenemos el Consejo Empresarial, que el próximo año cumple diez años. Eso no lo tiene ningún otro país. Eso se refleja también en gremios de menor tamaño, como la Cámara de Comercio de Lima que hace poco con la de Santiago.

¿Qué trabajados de promoción comercial se vienen impulsando?Hoy día, con la , no solo contamos con oficinas comerciales conjuntas en Turquía y Marruecos, sino que abriremos embajadas en conjunto. Se están organizando seminarios para atraer inversión a los cuatro países. En un par de semanas en Nueva York, los cuatro presidentes presentaran a sus países como destino propicio para la inversión extranjera.

No es poco común que el agregado comercial de Chile no solo venda los productos chilenos, sino los peruanos. Nuestros países solos son un error estadístico, pero juntos ya somos algo.

¿Qué deberíamos aprender de Chile?Chile, gracias a políticas de Estadio, logró primero una red de acuerdos comerciales suscritos con los países más importantes del mundo. Eso es una primera señal de confianza que uno va mostrando y lo hemos sabido capitalizar. Creo que Perú eso ya lo tiene, pero le falta mayor experiencia en el mundo internacional, que poco a poco adquiere. Y por eso la transferencia y cooperación mutua entre empresarios y agencias del Estado.

¿Por qué cree usted que subsisten las rivalidades entre ambos países en algunos productos de agroexportación?Salvo la uva en un mes al año, en nada competimos. Quizás existen sensibilidades en los mercados locales porque generalmente Chile es muy celoso de su agricultura. Una de los activos que tenemos en el mundo es nuestra seguridad sanitaria y fitosanitaria porque tenemos desierto, hielo, cordillera y mar.

Somos una isla fitosanitaria, y somos muy celosos de mantenerla porque cualquier situación que nos complique nos cierra los mercados, y los mercados más exigentes del mundo. Solo con un TLC no logras abrir Japón y Corea, donde hoy Chile hoy entra con todo su abanico. Por eso Chile a veces aparece extremadamente celoso y quizás para ser un país sudamericano sus estándares de calidad son muy exigentes. Hay que entender que no es solo por Chile. Si fallamos nos cierran el mercado. En el aeropuerto de Chile las declaraciones son muy rigurosas. A cualquier turista le dices que si tiene dudas mejor declare porque las penas son del infierno.

Entonces, es una cuestión de prestigio…Ese prestigio que ha costado mucho ganar, más de veinte años, y que se puede venir abajo en cualquier momento.

Estos bloqueos se deben ver en todo caso en un contexto más amplio…Son coyunturas puntuales de lobbies y presiones que los empresarios hacen en todas partes. No podemos tomar estas medidas si estamos vendiéndonos como un solo país a terceros mercados, donde no nos conocen. Con suerte conocen Brasil, y el resto de Sudamérica es una sola cosa.