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Francisco González ha aprovechado hoy su intervención en la Junta de Accionistas de BBVA para volver a lanzar un mensaje: el populismo le puede hacer daño a la recuperación española.
El banquero no nombró directamente a ningún partido, pero ha afirmado que lo que ocurre en otros países, Grecia, demuestra que "los populismos y las promesas inviables llevan a los resultados contrarios".
El presidente de BBVA afirmó que España puede crecer este año un 2.7%, e incluso podrían darse sorpresas positivas. Sin embargo, en su opinión, todo dependerá de que haya estabilidad política. González también volvió a insistir en la importancia de luchar contra la corrupción.
Con respecto a la evolución del grupo, González ha destacado la sólida posición de solvencia de BBVA, confirmada por los resultados de los stress test que realizó el Banco Central Europeo a los bancos europeos.
Esta solidez, aseguró el presidente, sirve para financiar el crecimiento; retribuir al accionista y prepararse para el futuro. De hecho, el banquero reiteró que el objetivo del grupo es pagar un pay-out de entre el 35% y el 40%, completamente en efectivo: "lo haremos progresivamente, en línea con las exigencias regulatorias", explicó. Este año, BBVA volverá a pagar dos dividendos en efectivos y dos scrip.
González citó dos operaciones que BBVA ha realizado para prepararse para el futuro: la compra de CatalunyaBanc y el incremento de la participación en el turco Garanti.
Pero, sobre todo, el presidente volvió a insistir sobre la importancia de la tecnología y de la revolución digital. "BBVA lleva ocho años preparándose", ha reiterado, asegurando que ningún otro banco en el mundo está tan avanzado en tecnología como BBVA.
Los accionistasEn el turno de preguntas, varios accionistas vinculados con las agrupaciones sindicales con presencia en el banco pidieron mejoras en las condiciones de la plantilla.
En concreto, se solicitó que se aclare ya cuál será el futuro laboral de los empleados de CatalunyaBanc, una vez que BBVA tome el control del banco catalán.
En su respuesta, González aseguró que todo el proceso se llevará a cabo con la máxima transparencia y pactando, como ya se hizo con la incorporación de Unnim.
El presidente rechazó las acusaciones vertidas por algunos accionistas que han indicado que la cúpula no ha dejado de subir su remuneración en estos años de crisis.
"Los sueldos están congelados desde 2008", respondió González. El banquero también avisó a algunos de los intervinientes que fueron críticos con la rentabilidad del banco que el ROE, aunque debe mejorar, no volverá a ser lo que era, porque ahora lo bancos tienen que tener mucho más capital por cuestiones regulatorias.
Diario Expansión de EspañaRed Iberoamericana de Prensa Economica (RIPE)