Redacción Gestión

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París, (AFP).- cuenta con amortiguadores fiscales y comerciales frente a la desaceleración global y la caída de precios de las materias primas, en contraposición a la vulnerabilidad del Mercosur, y en especial de Brasil, destacaron ministros y analistas al margen de la reunión de la OCDE en París.

"Todos hemos resistido bastante bien porque teníamos buenos cimientos (…), dados por unos marcos de política macroeconómica bastante sólidos de objetivos de inflación, reglas fiscales y prudencia en el manejo de sistema financiero", dijo a la AFP Mauricio Cárdenas, ministro de Hacienda de Colombia, que junto a México, Chile y Perú forma la .

La OCDE pronosticó para este año un crecimiento mundial débil, de 3%, y rebajó sus previsiones de muchos países emergentes.

México y Chile, miembros de la OCDE, tendrán un crecimiento algo por debajo de la media mundial.

Pero así y todo México crecerá un 2.6% – una décima más que en 2015 – y en 2017 un 3%. El crecimiento de Chile se desacelerará de 2.1% en 2015 a 1.5% en 2016, pero tendrá un fuerte repunte en 2017, a 2.5%.

Colombia crecerá un 2.4% este año, según la OCDE, y Perú registrará una de las mayores tasas de expansión de la región, de 3.8%, de acuerdo con las previsiones de gobierno.

Nada parece detener en cambio el hundimiento de Brasil, que enfrenta su peor recesión en casi un siglo. El PBI de la principal economía latinoamericana, que ya cayó un 3.8% en 2015, se contraerá un 4.3% este año y un 1.7% en 2017, indican los pronósticos de la OCDE.

"Estábamos mejor preparados, primero porque pudimos absorber parte de este choque con una depreciación de nuestras monedas, segundo porque habíamos ahorrado durante la época del auge y también todos hemos logrado mantener unas economías bastante sanas desde el punto de vista del manejo fiscal", afirmó Cárdenas.

Resistir a la desaceleración de China

Los países de la Alianza del Pacífico multiplicaron los acuerdos de libre comercio con diferentes regiones del mundo, lo cual les permitió contar con mercados alternativos para temperar el impacto de la desaceleración de China, afirman analistas y gobernantes.

"Los países de la Alianza del Pacífico han venido siguiendo políticas más saludables, orientadas al futuro y que tuvieron en cuenta que el ciclo (de las materias primas) podía terminar", dijo a la AFP Erick Langer, académico de la Universidad de Georgetown, en Washington DC.

El presidente de Paraguay, Horacio Cartes, admitió a finales de 2015 que la Alianza del Pacífico "hizo mejor los deberes (…)que el Mercosur".

Su ministro de Finanzas, Santiago Peña, aseguró a la AFP que el gobierno interino de Brasil muestra un renovado interés en desarrollar acuerdos comerciales.

"Los presidentes han mencionado que necesitamos hacer que el Mercosur vuelva a sus inicios, a eso que se planteó en el año 1991 cuando se firmó un acuerdo comercial. En lo últimos años, lastimosamente, eso se ha desviado", dijo Peña.

Para Langer, el mejor ejemplo de éxito es Chile, con una economía abierta y una política macroeconómica prudente.

"Pero Chile es un país pequeño, sin un gran sector manufacturero. Lo que funciona en un país pequeño no necesariamente se puede aplicar en otros casos", advirtió.

Réplicas en el Mercosur

Los socios de Brasil en el Mercosur (Argentina, Paraguay, Uruguay y Venezuela) están además expuestos a las convulsiones del gigantesco país.

El PBI de Venezuela, golpeada igualmente por la caída del precio del petróleo y por una inflación galopante en medio de una crisis política, retrocederá este año un 8%, según las proyecciones del FMI.

El FMI pronostica igualmente una recesión de 1% en Argentina, una desaceleración de la economía uruguaya (hasta +1.3%) y una expansión más holgada en Paraguay (+2.8%).

"El efecto de la economía brasileña tiene un enorme impacto en el Mercosur, lo decía en días pasados el propio ministro de Hacienda de Argentina. A ellos les significa casi 1.5 puntos del PBI", explicó a la AFP el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.

La posibilidad de un contagio de la recesión en Brasil no preocupa en cambio a Chile y Colombia.

"Brasil es una economía muy importante de la región pero no tiene tantos vasos comunicantes con economías como la colombiana", sostuvo Cárdenas.

El ministro de Economía de Chile, Luis Felipe Céspedes, subraya las diferencias entre los dos modelos.

"En el caso de Brasil, son factores idiosincráticos los que explican la situación que están enfrentando. Nosotros tenemos como economía chilena el desafío de incrementar nuestros niveles de crecimiento y ese desafío se hace sobre la base de generar innovación",dijo Céspedes a la AFP.