(Foto: GEC)
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El exministro de Economía y Finanzas, Alfredo Thorne, consideró que el otorgamiento de un tercer bono en favor de la población vulnerable podría generar un estímulo a la economía, tomando en cuenta que el segundo bono “prácticamente se ha distribuido muy poco y no ha llegado a toda la población”.

Está asignación en más de 10% para salud y educación (en el presupuesto 2021) me parecen exageradas. Hubiera preferido -por ejemplo- una mayor asignación a los bonos. Es lamentable la mala distribución del último bono, que la prensa no lo ha tomado en cuenta, pero prácticamente se ha distribuido muy poco del segundo bono a la población vulnerable, pero lo que tal vez nos permitiría generar un estímulo a la economía es un tercer bono a la población vulnerable para aumentar el consumo”, precisó en una entrevista a Canal 7.

Como se recuerda –durante el mandato de Vizcarra– se estableció el otorgamiento de una serie de bonos. Siendo el último, el bono familiar universal que sería entregado en una sola armada de S/ 760, cuyo pago del primer tramo comenzó el 20 de mayo y beneficiaría a más de 1′700,000 familias afectadas por la pandemia.

Sin embargo, los hogares que no fueron considerados en ningún bono previo tuvieron la oportunidad de actualizar sus datos en la web del Reniec hasta el 3 de junio y tras -la verificación de información- se determinó la entrega del bono familiar universal a 2′500,000 familias adicionales que no habían recibido los S/ 760, siendo este el segundo tramo y cuyo pago empezó a inicios de agosto. Es este bono a la que hace alusión Thorne

En concreto, la ejecución del segundo tramo del bono universal familiar aún no llega al 70% a 30 días para terminar el 2020.

Cuando uno mira a nivel agregado la economía, lo que realmente sorprende es el lado negativo del consumo privado y un buen estimulo pudo haber sido darle un tercer bono a la población vulnerable, de esa manera se protege a un segmento de la población y a la vez apoyas a la economía”, remarcó.

En esa línea, el economista dijo que “ha sido una sorpresa” que la inversión privada apenas retrocediera 7% al tercer trimestre, lo que en su opinión sería “un efecto temporal”.

Creo que el resultado de la inversión privada se debe a un efecto temporal. El hecho de que muchas inmobiliarias dejaran proyectos paralizados y se reabriera la economía, pues ha acelerado su ejecución, lo que permitió que la inversión privada no caiga tanto, pero el resto de la inversión privada pues no lo ha ido también”, comentó.

De hecho -tal como se muestra en la gráfica- los indicadores de la inversión privada al tercer trimestre muestran que el consumo de cemento se recuperó en 2.3%. No obstante, el volumen de importaciones de bienes de capital retrocedió en 19.7%. Igualmente la exportación de materiales de construcción y celulares cayó en 19%. (Ver cuadro)

El exministro de Economía subrayó que la inversión pública -que registró un crecimiento cercano a 26% a noviembre- representa entre 4% y 5% del PBI. “No representa mucho, pero si tiene un gran efecto de arrastre sobre la economía”.

En la primera mitad del año, prácticamente la inversión pública desapareció. Creo que hay que aplaudir el hecho de que estemos viendo una mayor ejecución (en la inversión pública). Uno de los grandes problemas, que se arrastra desde el 2018, es la baja ejecución de la inversión pública, entonces el ver que está empezando a tomar cuerpo, ayuda mucho”, acotó.

A reglón seguido, precisó que otro tema relevante -tomando en cuenta las elecciones de abril del 2021 en la que participarán cerca de 24 candidatos- es que la inversión privada se va a retraer, “ya que no van a ver muchos candidatos privados que se animen a invertir”.

Lo único que va a jalar a la economía fuerte es la inversión pública y el gasto público, por lo que el ministro Mendoza está poniendo el énfasis donde debería ponerlo, lo que va a jalar la economía hacia adelante”, puntualizó.

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