Rusia

El 32.6% de las empresas rusas está en manos femeninas. Sin embargo, los factores habilitadores son a veces deficientes, como por ejemplo la escasa inclusión financiera de las mujeres, su bajo nivel formativo, la inexistencia de legislaciones de género progresistas, la brecha salarial, las parcas condiciones generales de apoyo al emprendimiento o la percepción negativa de las empresarias (por parte de los hombres, ya que el 73% de las rusas lo ven con buenos ojos).

Existen factores más favorables. La firma de auditoría Grant Thornton señala que Rusia cuenta con una proporción de mujeres en puestos profesionales elevados superior a la de cualquier otro país del mundo. En concreto, el 45% de los altos cargos son mujeres, frente al 21% de Estados Unidos. La Organización Internacional del Trabajo arroja datos más modestos: Rusia ocuparía el puesto 25 en la clasificación de mujeres en puestos de mando, representando éstas un 39.1% del total. A su vez, la mayor parte de las mujeres con altos cargos lo hacen en la pequeña y mediana empresa, no en las grandes corporaciones.
Rusia El 32.6% de las empresas rusas está en manos femeninas. Sin embargo, los factores habilitadores son a veces deficientes, como por ejemplo la escasa inclusión financiera de las mujeres, su bajo nivel formativo, la inexistencia de legislaciones de género progresistas, la brecha salarial, las parcas condiciones generales de apoyo al emprendimiento o la percepción negativa de las empresarias (por parte de los hombres, ya que el 73% de las rusas lo ven con buenos ojos). Existen factores más favorables. La firma de auditoría Grant Thornton señala que Rusia cuenta con una proporción de mujeres en puestos profesionales elevados superior a la de cualquier otro país del mundo. En concreto, el 45% de los altos cargos son mujeres, frente al 21% de Estados Unidos. La Organización Internacional del Trabajo arroja datos más modestos: Rusia ocuparía el puesto 25 en la clasificación de mujeres en puestos de mando, representando éstas un 39.1% del total. A su vez, la mayor parte de las mujeres con altos cargos lo hacen en la pequeña y mediana empresa, no en las grandes corporaciones.

En los últimos cinco años, 10 regiones del país registraron importantes avances en la reducción de la brecha de género, informó la Cámara de Comercio de Lima ().

"Las que más destacan son Áncash, Apurímac, Junín y Moquegua. La primera fue la región con mayores logros en la equidad de género, mejorando siete de ocho subpilares evaluados y retrocediendo solo en uno referido a la participación en el mercado laboral", detalló , presidenta de la CCL.

La representante del gremio empresarial destacó que si bien la se reduce en el Perú en algunas regiones, todavía hay una agenda que se debe impulsar a nivel de políticas de Estado.

“Es necesario pensar en políticas legislativas en beneficio de las mujeres, hay que estimar el impacto que tiene la política de cuotas. Las mujeres peruanas somos hábiles y fundamentales en aspectos como la lucha contra la pobreza o el emprendimiento empresarial. Hemos conquistado espacios pero debemos seguir capacitándonos, seguir disminuyendo esa brecha que nos separa de los hombres”, resaltó.

Este avance también fue favorable para Amazonas, Ayacucho, Huancavelica, Huánuco, Loreto y San Martín, los que registraron mejoras en cinco de los ocho subpilares evaluados.

En tanto en Lima, Cusco, Ica, Madre de Dios, Piura y Puno la brecha de género se mantuvo a un mismo nivel entre el 2013-2017.

Según la CCL, este avance de una menor brecha entre mujeres y hombres también se observa en la creación de empresas a nivel país.

Durante el 2017 las mujeres fueron responsables del 52.5% del total nacional, es decir, las mujeres constituyeron 98,510 unidades de negocios, principalmente en los sectores servicios y manufactura.

Cabe mencionar que este análisis del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la CCL, se realizó bajo la metodología del Global Gender Gap Index (GGCI) del Foro Económico Mundial, considerando -para el caso peruano- el primero, segundo y cuarto pilar además de ocho subpilares de acuerdo a los datos disponibles del INEI y del JNE entre los años 2013 y 2017.

El primer pilar evalúa el ingreso laboral y la tasa de ocupación de cada género respecto a su respectiva población en edad de trabajar, mientras el segundo pilar se refiere al acceso en los tres niveles de educación (primaria, secundaria y superior) y el cuarto pilar se centra en la participación en la toma de decisiones a nivel político, es decir se incluye a las mujeres en el parlamento, ministerios y regidoras en cada gobierno local.

Regiones que retrocedieron
Respecto a los retrocesos en el gremio empresarial identificó siete regiones. En este grupo Tacna lidera la lista al retroceder seis subpilares y avanzar solo en dos. "En esta región los retrocesos se refieren a una menor participación de la mujer en el mercado laboral, menor acceso a la educación primaria y superior, además del poco empoderamiento de la mujer en el ámbito político", comentó la presidenta de la CCL.

Le siguen Arequipa, Cajamarca, Lambayeque, Pasco, Tumbes y Ucayali los que retrocedieron en cinco de ocho subpilares evaluados.

Brecha salarial
Respecto a la brecha salarial entre hombres y mujeres, esta disminuyó en 11 regiones destacando Puno, Huancavelica, Cusco y Tacna. No obstante, en 13 regiones la aumentó en cinco años, principalmente en Huánuco, Madre de Dios y Ucayali.

Para el gremio empresarial, si bien algunas regiones registraron mejoras en la equidad de género, todavía se deben hacer mayores esfuerzos para combatir todo tipo de discriminación entre hombres y mujeres ya sea desde el sector privado o público.

"Superar esta brecha tendrá impactos positivos en el capital humano y el crecimiento económico del país, más si se toma en cuenta que potencialmente se ve afectada la mitad de la población. Sin duda también existen aspectos culturales que arrastramos como sociedad y que debemos superar contribuyendo así con la equidad y en general con los derechos humanos", sostuvo Torriani.