Thales acordó la compra del fabricante de chips Gemalto y así se convertirán en el "líder mundial en seguridad digital". (Foto: Internet)
Thales acordó la compra del fabricante de chips Gemalto y así se convertirán en el "líder mundial en seguridad digital". (Foto: Internet)

París.- El grupo de tecnología aeroespacial y defensiva Thales acordó la compra del fabricante de chips Gemalto en una oferta íntegra en efectivo, con la promesa de crear un "líder mundial en seguridad digital" y superando una oferta previa de adquisición de la firma tecnológica Atos.

La oferta de 51 euros por acción, respaldada por los directorios de ambas compañías, representa una prima del 57% sobre el precio de cierre de cotización de Gemalto el 8 de diciembre, indicaron ambas compañías en un comunicado conjunto el domingo.

Atos vio cómo su oferta de 46 euros por acción era rechazada por Gemalto esta semana, aunque declaró que perseveraría en su iniciativa. Atos declinó comentar el acuerdo entre Thales y Gemalto.

El presidente ejecutivo de Thales, Patrice Caine, dijo más tarde a Reuters que la compañía gastará 5,600 millones de euros (US$ 6,600 millones) en Gemalto, incluidos 800 millones de euros de deuda.

Esto mostró que su oferta básica por las acciones de Gemalto está valorada en 4,800 millones de euros, comparada con los 4,300 millones de euros de la oferta de Atos.

Thales y Gemalto afirmaron que su fusión creará uno de los tres actores más importantes del mundo en seguridad digital, con 3,500 millones de euros en ventas.

"Combinada con el liderazgo único de la cartera digital de Gemalto, Thales estará posicionada de manera ideal para ofrecer una solución integral, asegurar cadenas completas de decisión digital crítica, desde la creación de datos en sensores a toma de decisiones en tiempo real", señalaron en un comunicado.

Thales podrá financiar la oferta a través de recursos en efectivo disponibles y un crédito comprometido por 4,000 millones de euros, indicó. Las ofertas de adquisición de Atos y Thales llegaron tras un año difícil para la francoholandesa Gemalto, en el que el precio de la acción cayó con fuerza tras una serie de advertencias sobre las ganancias.